Si cada ciudad fuera un par de zapatos, ¿qué clase de zapatos serían?

«Si cada ciudad fuera un par de zapatos, ¿qué clase de zapatos serían?» Lo que comenzó como una mera pregunta ha terminado generando horas de discusión, tratando de determinar qué zapato, bamba o sandalia definía mejor a cada ciudad… ¡Fue casi imposible llegar a un acuerdo!

Finalmente, pudimos llegar a un resultado final. Por supuesto, vuestras opiniones, críticas (sólo si son buenas;)) y sugerencias son más que bienvenidas.

Barcelona

Es la capital hipster del mundo, la ciudad de los mil y un festivales indie, de gafas de sol con estilo y diseño, por lo que no hay duda de que lleva calzado hipster. Puede ser un par de Toms, Converse o los clásicos zapatos marrones de Bostón, pero lo que se lleva siempre es un par de Vans. Hablando de zapatos, si realmente quieres encontrar las tiendas hipster más chulas, deja que la reina del hipster Carla te lleve por la ruta más trendy.

París

Si quisiéramos personificar la ciudad de París (ahora los hombres, no se enfaden con nosotros) sería una mujer. Se vestiría con cero estridencias, exhibiendo un estilo bastante bohemio, con su gorro de lana, una muy linda falda floreada hasta la rodilla… Muy Amelie-esq. Y mientras nuestra amada Amelie usa un tipo de calzado diferente, París le acompañaría con zapatos planos muy chic.

Nueva York

La ciudad que nunca duerme no podría caber mejor en unas Nike Air Max, perfectas para sobrevivir a la agitada vida diaria de la ciudad. Se ajustan a ese estilo «chic pero casual» tan común en la ciudad, y reflejan el espíritu saludable con el que los neoyorquinos están obsesionados.

Roma

Para los romanos (y los italianos en general) la moda es como una religión. No importa la hora que sea, siempre están impecables (no los encontrarás vestidos torpemente incluso cuando están durmiendo). Además de su elegancia, también son conocidos por ser llamativos. Un verdadero italiano nunca pasaría desapercibido. Así que un par de zapatos Dolce & Gabana con un toque de oro sería un calzado adecuado para Roma. Algunos zapatos italianos de calidad son siempre una buena opción.

Berlín

Los Martins (o cualquier tipo de botas similares) reflejan ese espíritu punk, transgresor y rebelde que caracteriza a la ciudad de Berlín. Zapatos con fuerza y personalidad, resistentes al impacto, como la gente de Berlín.

Marruecos

Los artículos artesanales de todo tipo son muy comunes en Marruecos, y esos maravillosos, típicos y cuidadosamente hechos a mano cappals reflejan ese respeto y amor por la tradición.

Tokio

Tokio es como un viaje al futuro. No hay nada igual. La influencia del manga y la tecnología le dan a esta megalópolis un estilo muy pintoresco y, en el buen sentido, muy raro y surrealista. Así que cuando intentamos imaginar qué tipo de zapato sería Tokio, pensamos en esos típicos zapatos japoneses con plataformas inverosímiles y un diseño futurista (pero súper futurista, ¿vale?). Muy típico de hecho.

Moscú

No hay que ser Einstein para darse cuenta de que si Moscú fuera un zapato, sería un clásico de toda la vida. El invierno está llegando y debemos estar preparados.

San Francisco

Converse All Stars han sido (desde hace algún tiempo) el calzado oficial de la cuna de los empresarios. Puedes usarlos sin usarlos, van con todo y dan un toque casual para recordarte, «hey, soy genial».

Londres

Londres es roca. Los Stones son roca. Los Stones llevan botas de Kensington. Por lo tanto, si Londres fuera un zapato, serían botas de Kensington. Pura lógica. Por esa misma lógica, si quieres descubrir la verdadera escena rockera de Londres, hazlo con un rockero hardcore como Malcolm que te enseñará los mejores sitios!

Río de Janeiro

Unas simples chanclas Havaianas, gracias. El asombroso clima de Río te invita a vivir en la playa, de la que sólo tienes que alejarte para ir a un bar y beber una caipirinha. Hay una razón por la que las sandalias Havaianas son brasileñas.

Buenos Aires

Argentina es pura pasión. El amor, el fútbol, la política, todo lo que hay se vive con pasión. Pero de todas esas cosas, ¿hay algo más apasionante que el tango? Claro que no. Entonces, ¡zapatos de tango!

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