Pyatigorsk: baño termal a la sombra del Cáucaso
Pyatigorsk es una pequeña ciudad situada en el Cáucaso norte, en la República de Stavropol Krai, del distrito federal sur de Rusia. Fue fundada en 1780 y su nombre viene a significar “5 montañas”. Este lugar es famoso en Rusia por sus aguas termales, tanto que, durante mucho tiempo, nobles y poderosos se acercaban por estas tierras para bañarse y relajarse en sus aguas curativas. Ahora, representa un famoso centro turístico, que ha crecido al amparo de estas aguas termales; la ciudad turística por excelencia de la zona, que guarda parte del pasado entre el nuevo bullicio que ha traído las oleadas de turistas, principalmente rusos, que llegan desde diferentes regiones del país.
Pyatigorsk está muy bien comunicada, se encuentra a apenas 20 kilómetros de Mineralnye Vody, y las líneas de autobús son abundantes. Por otra parte, la ciudad dispone de estación de tren que la enlaza con el resto del país. Las diferentes zonas de la ciudad están unidas por tranvías.
Nos podemos alojar en cualquiera de los muchos hoteles que tiene la ciudad. En verano, si no tenemos algo reservado, nos podemos ver en algún aprieto para encontrar donde pasar la noche. Ese fue nuestro caso. Suerte que existe, también, la posibilidad de alquilar alguna habitación, manera ideal de mimetizarse entre la gente del lugar.
Bien, ahora, ¿Qué hacer? Pues, relajarnos en sus aguas termales, por ejemplo. Aquí la oferta es extensa, para todos los gustos. Permítanme que les cuente una anécdota al hilo de esto de los balnearios y demás. Pónganse en situación; llegas a la ciudad, ahora toca buscar un lugar para pernoctar, un hotelillo normal y corriente, sin importar compartir vivencias con algún artrópodo. Nada exigente. Total que, un poco hasta las narices de cargar con la mochila, hay está; nada del otro mundo, pero bueno. Una mujer está atendiendo en el vestíbulo. Como es imposible la comunicación verbal, está se resuelve a través de la mímica y las artes plásticas. Aquí las dotes de dibujante son muy buenas. Aún así, parece no funcionar; parece que alguien es duro de entendereras. Al final, la mujer se levanta y nos hace seguirla. Hacia una puerta, parece que nos quiere enseñar los aposentos. A la que abre la puerta aparecen varias personas, en mitad de su baño reparador. Era un balneario. Imagínense la cara de mi compadre y yo.
Ya, saliendo de este inciso, que no creo que viniera al caso, pero no he podido resistirme el compartirlo. ¿Qué más hacer? Podemos caminar por su paseo. Pyatigorsk tiene una calle principal, que bien podría ser un paseo marítimo o malecón, de ese pelo. Pero sin el mar o río. Bares, restaurantes, ambiente, bullicio. Gente que viene y que va, caminantes, todos preparados para la ocasión, ir y venir, arriba y abajo. Y es que, a la que se hecha la tarde, la gente sale a caminar por el paseo, sin otra pretensión que pasar la tarde noche. Si venimos de visitar otras zonas de la región, esto chocará de lleno con lo visto allá.
Otra cosa para hacer en la ciudad es visitar un parque muy apañado que tienen aquí, podemos coronar una colina en la que se sitúa una especie de kiosco. Desde aquí, podemos disfrutar viendo como el sol cae sobre el horizonte.