Nómada digital: ¿cómo recorrer el mundo mientras se trabaja?
Hoy en día, es cada vez más raro que un empleado permanezca durante años, y años, y años, y años, y años en la misma empresa. Mientras que antes, el contrato permanente representaba seguridad laboral, hoy en día los jóvenes sólo quieren una cosa: poder viajar por el mundo mientras trabajan. Y sí, nuestra sociedad está en constante evolución, digitalizándose y ofreciendo facilidad para viajar. Entonces, ¿por qué estar encerrado en las mismas oficinas durante años? Querer convertirse en un nómada digital es una cosa, pero implica muchas concesiones y una buena gestión presupuestaria.
Índice
Nómada digital: definición
El nómada digital, tecnomade o, en francés (pero menos utilizado) «nomade numérique» es el que no permanece en su sitio y viaja de ciudad en ciudad, atravesando muchos países, mientras trabaja. En concreto, el nómada digital puede trabajar desde cualquier lugar, siempre y cuando tenga acceso a una buena conexión a Internet y tenga su ordenador allí donde vaya.
Los nómadas digitales se dividen generalmente en tres categorías. En primer lugar, los trabajadores autónomos, o autónomos, que trabajan por cuenta propia para diferentes clientes. En segundo lugar, los empleados que trabajan a distancia: están vinculados a una empresa pero no tienen que estar en las oficinas de la empresa. Por último, los empresarios que crean servicios y productos en evolución pertenecen a la tercera categoría.
Ganarse la vida
Es caro viajar. Es por eso que es esencial asegurarse de que se gane bien la vida, sin importar dónde se encuentre. Además, algunos le aconsejarán encarecidamente que ahorre antes de embarcarse en esta gran aventura porque es muy difícil tener suficientes ingresos mensuales para mantener la cabeza por encima del agua.
El cóctel perfecto para tener éxito mientras viaja es: ser riguroso, decidido, trabajador, flexible y de mente abierta. Riguroso porque serás tu propio jefe, no tendrás a nadie que te diga qué hacer. Decidido porque así es como avanzarás: sabiendo lo que quieres. Trabaja duro porque tendrá que trabajar para lograr sus objetivos, especialmente si cambia de lugar con regularidad. Finalmente, flexible y abierto para poder adaptarse a cualquier situación, a cualquier país y a cualquier cultura.
Elija su destino
Antes de abordar todo, hágase las siguientes preguntas: ¿para poder trabajar, tengo que ir absolutamente a la oficina o puedo trabajar desde casa? ¿Tengo que reunirme con los clientes en persona? ¿Importa la ciudad en la que me encuentro? ¿Puedo usar Skype para chatear con mis clientes? Todas estas preguntas son esenciales para entender desde dónde puedes trabajar y este estilo de vida se adaptará a tu trabajo.
Y sí, es necesario hablar de destino en plural. De hecho, el nómada digital tiende a viajar mucho y a cambiar regularmente de ciudad, incluso de país, tanto que se siente atraído por los viajes y los descubrimientos.
Financiarse a sí mismo
Como se mencionó anteriormente, muchos nómadas digitales ahorran durante meses o incluso años para acumular una reserva de dinero que se utilizará en caso de tiempos difíciles. Sin embargo, no se le da a todo el mundo para poder dejar de lado, especialmente cuando se es joven.
Para llevar a cabo el proyecto de tus sueños y embarcarte en una aventura, puedes pedir un préstamo, que pagarás como cualquier otro crédito: en forma de cuotas mensuales. Por lo tanto, asegúrese de tener suficiente flujo de caja para poder pagarlo.
¿Tienes suficiente dinero en tu cuenta para empezar esta aventura? Si este no es el caso, siempre puede solicitar un préstamo personal. Además, sacar una tarjeta de crédito para pagar y retirar dinero en el extranjero. Siéntase libre de comparar todas las instituciones financieras para encontrar el producto financiero adecuado para usted.