¿Cómo se coloca el saco de dormir en la mochila?

El mejor lugar para colocar tu saco de dormir suele ser dentro de tu mochila, si es posible. Esto la protege del clima y los enganches, y también mantiene el peso más cerca de su cuerpo, lo que lo hace más fácil de transportar.

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Debes guardar tu saco de dormir en la parte inferior de la mochila, ya que esta parte es ideal para llevar los elementos más voluminosos que no vas a utilizar mientras camines, sino hasta que llegues al campamento al final del día. Recuerda plegarlo al máximo para que ocupe menos espacio y no desequilibre el peso.

En este artículo, te explicaremos cómo colocar el saco de dormir en tu mochila para que no rebote, se empape o te ralentice, y también te ayudaremos a solucionar el problema de por qué no cabe en tu mochila o qué hacer cuando no hay más remedio que colocarlo fuera.

Si áun no tienes tu propio saco para dormir o piensas cambiar el que tienes, esta opción que te muestro a continuación puede ser la que necesites para tu siguiente aventura.

Saco de domir Millet BAIKAL

Saco de dormir color saphir con forma de sarcófago ajustada al cuerpo. Ligero y fácil de transportar gracias a la funda de compresión incluida.

Aislamiento e impermeabilidad asegurados gracias al relleno sintético de poliéster reciclado y al exterior de poliamida. Pérdida de calor reducida gracias a la solapa antifrío interna.

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Índice

Cómo colocar el saco de dormir en tu mochila

Si vas a emprender un largo viaje de mochilero, y llevas alimentos y suministros para varios días, es posible que te preguntes cómo incluir la bolsa de dormir en tu mochila. Después de todo, el saco de dormir es, sin duda, el artículo más voluminoso que llevarás.

Es muy importante que guardes de forma correcta el saco de dormir en tu mochila. Esto hará que aproveches mejor el espacio, prolongues su vida útil y puedas incluir la mayor cantidad de artículos necesarios.

Lo mejor es guardar el saco sin comprimir su funda. Si lo mantienes comprimido en su funda de almacenamiento, corres el riesgo de dañar la guata que perderá su volumen.

Aunque los sacos de dormir de guata son menos frágiles, a la guata, como al plumón, no le gusta permanecer comprimido por largos periodos de tiempo. Hay 2 soluciones disponibles:

Usa una funda de almacenamiento, una que sea más grande que una funda de compresión, para que mantengas tu saco de dormir sin comprimir.
Cuélgalo en una percha, como si fueran unos pantalones.

También es importante que, antes de guardar tu saco de dormir en la mochila, consideres estos 2 factores:

Primero, ¿tu mochila es lo suficientemente grande para tu aventura?

Segundo, ¿qué tan empacable es tu saco de dormir? A medida que el equipo se vuelve cada vez más técnico, hay más y más equipo ultraligero por ahí. Si bien tu viejo saco de dormir puede proporcionar un buen aislamiento, es posible que no se empaque muy pequeño y termine ocupando 3/4 del espacio dentro de tu mochila.

Algunos sacos de dormir para mochileros y edredones para acampar en la actualidad tienen el tamaño de un Nalgene y aún así lo mantienen calentito por la noche, por lo que puede valer la pena invertir en una opción liviana, especialmente si planeas viajar mucho con mochila.

Si tienes una mochila del tamaño correcto y un saco de dormir empacable y todavía tienes problemas para que quepa todo, entonces es posible que tu problema sea el equipaje. Empacar la mochila de la forma correcta te ayudará a capitalizar el espacio dentro de su bolso sin tener que renunciar a ningún artículo esencial.

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Qué hacer si tu saco para dormir no cabe en tu mochila

Si has intentado todo lo anterior y aun así no puedes hacer que las cosas funcionen con tu saco de dormir, puedes adjuntarlo fácilmente al exterior de la mochila. Existen varios métodos para sujetar el saco de dormir a la mochila, pero para todos ellos querrás envolver el saco de dormir en algo impermeable, como una bolsa de basura, cubierta de lluvia o bolsa seca para protegerlo.

También es importante que tu bolsa de dormir esté bien asegurada, centrada y ajustada contra tu mochila para que sea más fácil de transportar y no la pierdas. Una vez que hayas cargado tu mochila, asegúrate de saber cómo ajustar el saco correctamente para que no te lastime la espalda ni te ralentice.

No es ideal llevar muchas cosas atadas al exterior de la mochila, a veces pueden enredarse en la vegetación, caerse, o llevar el peso hacia un lado y hacer perder el equilibrio y el balance, pero a veces es necesario.

Acontinuación, te enseñamos algunos métodos que te ayudarán a colocar correctamente el saco de dormir fuera de tu mochila.

5 métodos para unir el saco de dormir a tu mochila.

1. Usa la tapa

Aunque tu mochila puede venir con varias correas destinadas a sujetar el equipo, el mejor lugar es la tapa, que es la solapa en la parte superior. Simplemente abre la solapa superior, coloqua tu saco de dormir encima y luego sujeta la solapa.

Esto mantiene tu saco de dormir realmente seguro y mantiene el peso alto y centrado, lo que lo hace más fácil de transportar. Sin embargo, si tu mochila ya está llena hasta los topes o tiene artículos en el bolsillo con solapa, esta opción puede no ser posible.

2. Usa las correas de compresión

Cualquier buena mochila de senderismo tendrá correas de compresión, esas correas que puedes apretar para reducir el volumen cuando tu mochila está realmente llena. Si tu mochila tiene estas correas, puedes aflojar las hebillas, deslizar el saco de dormir y apretarlas para asegurar tu bolso en su lugar.

Una desventaja de este método es que las correas de compresión suelen estar a los lados de la mochila, lo que significa que la mochila puede sentirse desnivelada en la espalda. Si tu mochila tiene correas de compresión en la parte superior o inferior, usa estas.

3. Usa los portamateriales

Muchas mochilas para caminatas tienen trabillas diseñadas para sujetar equipos, como los sacos de dormir. Si tu mochila tiene algunas en la parte superior, aprovéchalas.

Si el saco de dormir tiene correas ajustables, puedes sujetar las correas a los portaequipajes de tu mochila. Para este método, querrás apretar las correas para que el saco de dormir no se balancee detrás de ti.

4. Usa cuerdas elásticas

Si el saco de dormir no tiene correas, puedes usar una cuerda elástica para sujetarlo a los lazos de tu mochila. Para ello, engancha el cordón en uno de los bucles de un lado de la mochila, enróllalo varias veces con firmeza alrededor de la mochila, y luego reserva el otro extremo en el otro lado de la espalda.

5. Usa los puntos de amarre en la parte inferior

En particular, si tu mochila tiene un marco externo, puede tener puntos de amarre en la parte inferior destinados a deslizar el saco de dormir. Asegúrate de apretarlos bien para evitar que la bolsa se balancee o se caiga, y ten cuidado cada vez que dejes la mochila en el suelo, ya que la bolsa de dormir estará en la parte inferior.