Cómo hacer que los más pequeños naden durante las vacaciones

Una de las partes más importantes de mis vacaciones es la piscina. Es la oportunidad perfecta para que mi familia y yo pasemos tiempo de calidad juntos en la piscina, y nos divirtamos chapoteando en ella. Las escapadas son una gran oportunidad para que los niños aprendan, especialmente cuando se trata de nadar. Así que he reunido algunos consejos fantásticos que te ayudarán cuando quieras enseñar a tus pequeños a nadar.

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1) Ir a la piscina todos los días

Aprender a nadar no ocurre instantáneamente. Tendrá que asegurarse de ir a la piscina todos los días y practicar. Usted no quiere abrumarlos enseñándoles el golpe de mariposa el primer día. Así que, repase lo básico como flotar de espaldas y patear sus pies, una y otra vez. Aunque sea con brazaletes, les dará la oportunidad de sentirse cómodos en la piscina, con sus alrededores y disfrutar divirtiéndose en el agua.

2) Usar inflables y flotadores

Usar brazaletes, flotadores o cualquier otro inflable es una gran herramienta para conseguir que tus pequeños naden. Podrán usarlos en la piscina de los niños y en el extremo poco profundo de la piscina principal; aquí, podrás practicar movimientos como espalda y pecho. Una vez que su pequeño se sienta más seguro en la piscina, intente quitarle los inflables o flotadores. Asegúrate de que estás ahí para ayudarlos. Una buena manera de hacerlo es tener dos adultos a corta distancia y lograr que su pequeño nade entre ustedes. Una ventaja de los hinchables es que mantienen a los niños entretenidos durante horas, y es la herramienta relajante perfecta para que puedas flotar alrededor de la piscina y tomar un poco de sol.

3) Elija un momento de tranquilidad

Si se va de vacaciones en medio del verano, es esencial que elija cuándo enseñarle a su hijo a nadar. Usted no quiere estar rodeado de mucha gente cuando está tratando de acostumbrarlos a nadar sin brazaletes. Si te diriges a la piscina temprano en la mañana o al final de la tarde, hay una gran posibilidad de que haya menos gente, lo que significa más espacio para que te muevas y los lleves a nadar. Otro beneficio de esto es que no será tan caliente, y te dará más tiempo para mostrarles cómo flotar, remar y nadar.

4) Hacerlo divertido

La parte más importante a recordar sobre la natación es que es divertida. Ya sea que conviertas esto en un juego o recompenses a tus pequeños con helado después, es más probable que se den cuenta si están disfrutando. ¿Recuerdas cómo era cuando estabas aprendiendo a nadar? Cuando estaba aprendiendo a nadar hace muchos años, recuerdo a mi padre haciéndome reír por todas partes chapoteando, haciendo bromas y dejándome ir a mi propio ritmo. Las vacaciones son para hacer recuerdos, y esta es tu oportunidad perfecta.

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