Catedral de San Pedro de Jaca
Ubicada en la comarca de la Jacetania, la histórica Catedral de San Pedro de Jaca, se conoce como una de las construcciones más emblemáticas y antiguas del imperio romano en España. La construcción de esta Catedral se inició casi al mismo tiempo que la de la Catedral de Santiago de Compostela, justo a finales del siglo XI. Esta Catedral se conoció como la sede episcopal y cabeza de la Reina de Aragón, pero todo fue una iniciativa del Rey Sancho Ramírez, quién había obtenido el vasallaje vaticano, después de su visita a Roma en el año 1068. El resultado de esta visita a Roma, fue la concesión de la Catedral como sede episcopal.
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Esta Catedral, tiene muchos aspectos que la hacen única y especial, entre ellos destacan la fachada oeste, el atrio y el frente de la misma. En el corazón de la bella fachada se puede apreciar una pieza única, el llamado y famoso Crismón, lo que se conoce como un símbolo monárquico aragonés. Al sur de la catedral, en su fachada sur, se destaca otro bello pórtico que se construyó con partes del antiguo edificio, a principios del siglo XVI, Este es el lugar en el cual además de lo mencionado antes, se destacan los capiteles y los ábsides, y solo uno de ellos se conserva intacto y sin modificaciones como el ábside del centro de la Catedral y el que está ubicado en el lado norte, los cuales sufrieron modificaciones en el siglo XVIII.
En el tope de la construcción, se encuentra una espadaña, o lo que es lo mismo, es lugar donde hace presencia el cuerpo de campanas de la Catedral, esto fue agregado a la construcción en el siglo XVI.
Esta histórica Catedral, como se ha mencionado antes, se conoce por ser una de las construcciones que cuentan con una gran y diferente decoración, en lo que respecta a esculturas, tanto en capiteles, metopas, ménsulas, basas y sobre todo en las paredes de la misma. Tanto capiteles, metopas y ménsulas llevan en sus espacios, decoraciones hechas con escenas bíblicas, figuras majestuosas que cuentan a los espectadores, muchas historias bíblicas, y otras que cuentan unas que otras fantasías o situaciones de la vida cotidiana.
También hay figuras que muestran un gran profesionalismo y calidad procedentes de por lo menos dos artistas diferentes, mientras que por otro lado los muros o basas llevan formas geométricas, unas bolas situadas en las basas, mejor conocido como el ajedrezado jaqués que le da un bello aire al edificio.
Todos estos hermosos elementos pertenecen propiamente al arte románico Jaqués, que se encuentran en todo el Camino de Santiago, lo que pone en evidencia su influencia a lo largo de esta tan conocida ruta de peregrinación.
Como punto final, en la parte de atrás de la Catedral, en la puerta trasera, se puede observar el patrón, o las guías de una unidad denominada vara jaquesa, la cual se encuentra tallada en madera.