Ecomuseo de la fauna pirenaica en Aínsa
En el poblado de Aínsa, ubicado en el antiguo castillo del siglo XI, se encuentra el Eco-Museo dedicado a la divulgación de la flora y la fauna pirenaica, y especialmente a la emblemática ave conocida como Quebrantahuesos.
El edificio que alberga el museo ha sido declarado Monumento Histórico-Artístico. Este espacio para la divulgación científica de manera didáctica está regentado por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos.
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Áreas del Eco-Museo
Sus instalaciones están divididas en cuatro áreas. La primera de ellas informa sobre los valores naturales y espacios protegidos de los Pirineos. Allí también pueden concertarse las visitas guiadas para todos los niveles en espacios naturales del Sobrarbe y acceder a la tienda del museo, dedicada a artesanía, publicaciones y recuerdos de la fauna de los Pirineos.
En la segunda área, los visitantes podrán disfrutar de la exposición permanente del Eco-Museo. En ella, los grandes protagonistas son la cordillera pirenaica, con sus impresionantes bosques, prados, ríos, cascadas, desfiladeros, cumbres y glaciares, y la flora y la fauna que en ellos vive.
También en esta área se descubren las especiales características de la estrella del museo, el Quebrantahuesos, a través de una proyección que se realiza en una sala con capacidad para 80 personas.
La tercera área es el albergue de aves que están incapacitadas para vivir en libertad. La visita a esta área se realiza de manera que las aves que permanecen allí no sean molestadas. Los visitantes pueden ver a las aves a través de un túnel que cuenta con vidrios espejados.
La cuarta y última de las áreas está destinada al servicio de documentación ambiental para los habitantes de la comarca del Sobrarbe. Cuenta con biblioteca, videoteca, fonoteca e internet. Está especialmente relacionado con temas de interés ambiental de los Pirineos.
El Quebrantahuesos
La impactante imagen de la silueta del Quebrantahuesos surcando los cielos en cualquiera de los paisajes pirenaicos es una de las más emblemáticas figuras naturales que ofrecen los Pirineos a sus visitantes y habitantes.
El “Gypaetus barbatus”, conocido popularmente por el nombre de Quebrantahuesos, es una ave de gran tamaño.Puede llegar a medir más de 2.80 metros de altura, lo que la hace una de las aves rapaces más grandes de la fauna de Europa.
Debe su nombre a su costumbre de aprovechar hasta el último hueso de sus presas, a las que suele fragmentar dejándolas caer desde gran altura hasta las rocas de los escarpados suelos pirenaicos. Su gran capacidad de adaptación le permite vivir en los duros ambientes de montaña.
Un signo físico característico del Quebrantahuesos es la oscura banda que le cruza la cara, simulando un antifaz. También posee alas ventrales con una coloración anaranjada de diferente intensidad.
A lo largo de su vida, el Quebrantahuesos enfrenta diferentes mudas de su plumaje, hasta alcanzar la definitiva a los ocho años de edad.
Su larga cola en forma de cuña, sumada a las largas y estrechas alan permiten que esta ave pueda realizar un vuelo extremadamente ágil y con total control a pesar de las cambiantes condiciones climáticas que suelen imperar en los Pirineos.