Monasterio de Leyre
Al pie de las montañas de Leyre. Refugio de reyes y religiosos y escenario de celebraciones son algunos de los papeles que ha jugado el Monasterio de Leyre a lo largo de su historia. La arquitectura de este monasterio ha influido notablemente en la evolución de las tendencias arquitectónicas monásticas en España. Consagrado en 1057. Olvidado hasta el siglo XIX cuando los monjes benedictinos de Santo Domingo de Silos revivieron la vida monástica entre sus muros en 1954. En 1979 se convirtió en una abadía autónoma. Su interior alberga tesoros sacros como la cripta que data del siglo XI, su gótica bóveda y su pórtico románico del siglo XII. Los orígenes del monasterio se remontan a la Edad Media. En el siglo X fue incendiado por los musulmanes y el rey Sancho García ordenó su reconstrucción en 1020.
Índice
Secretos del monasterio
Los visitantes del monasterio de Leyre podrán descubrir interesantes detalles que forman parte de su centenaria historia. La parte más antigua que se conserva hoy en día es la angosta cripta del siglo XI. Su sobria construcción, que consta de fustes y capiteles es una muestra del estilo románico arcaico.
La puerta Speciosa, ubicada en la iglesia, es otro de los grandes tesoros del monasterio. La adornan elementos de la Ruta Jacobea, como un ángel que anuncia el juicio final o un demonio que atrapa a un alma.
Dignos de interés son el paso subterráneo de la cripta y la capilla del Santísimo, que alberga un retablo y esculturas de Juan de Berroeta, del siglo XVII.
Dentro de la iglesia, destaca la bóveda gótica, que es considerada una de las más bella de Navarra.
También en el interior del templo reposan los restos de los primeros reyes de Navarra, en un imponente panteón. Junto a él se encuentra el Cristo de Leyre, una talla del siglo XVI.
Historias y leyendas
A lo largo de larga historia, son múltiples las leyendas que se han ido tejiendo alrededor de este lugar. Destaca entre ella la leyenda de San Virila. Esta relata que San Virila fue un abad que quedó en estado de éxtasis por 300 años, luego de escuchar el canto de un pajarillo cerca del monasterio. La leyenda explica que de ese lugar mana precisamente la fuente de San Virila.
Otra historia relacionada con el monasterio es la de las dos hermanas. Se cuenta que ambas fueron cruelmente decapitadas por los musulmanes por no querer convertirse y abandonar la fe cristiana. Sus restos son conservados en una arqueta de marfil que está en el museo de Navarra.
Actividades
Aunque entre 1836 y 1954 el monasterio permaneció deshabitado por la Desamortización de Mendizábal, a partir de ese último año se establecieron en él los monjes benedictinos de Santo Domingo de Silos.
Estos monjes tiene la especial costumbre de alabar a Dios a través de los conocidos cantos gregorianos. Cada día, entonan sus cánticos en diferentes horas y los visitantes podrán apreciar la armonía de este canto cargado de significado religioso.
Una opción que se ofrece en el monasterio es el hospedaje en 10 habitaciones individuales ubicadas dentro del claustro. Este alojamiento es sólo para varones y los huéspedes podrán realizar las comidas junto a los monjes en el refectorio.
Anexa al monasterio se encuentra una hospedería con 33 habitaciones, que permite a los viajeros un disfrute más completo de la paz y armonía del lugar y sus alrededores.
Datos
Los monjes realizan el licor de Leyre, un digestivo hecho a base de plantas recolectadas por ellos en los alrededores. El visitante podrá adquirirlo en la tienda del monasterio. En esta tienda se ofrecen también discos con cantos gregorianos y variados alimentos.
En los alrededores se pueden realizar agradables paseos como llegar hasta la Fuente de las Vírgenes o la la fuente de San Virila.