Deporte de motor y glamour en el icónico Gran Premio de Mónaco

El codiciado Gran Premio de Mónaco es la carrera más famosa del deporte de motor y una que todos los pilotos sueñan con ganar al menos una vez en la vida.

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Con una antigüedad de 1929, el circuito de 78 vueltas es como ningún otro en el mundo, ya que serpentea por las pintorescas calles de Monte Carlo, pasando por monumentos emblemáticos como el icónico casino, el Hotel de París y el puerto deportivo repleto de súper yates. El circuito es uno de los más desafiantes del mundo del automovilismo, ya que los tramos de la pista son tan estrechos que los adelantamientos son casi imposibles, y las 200.000 personas que se alinean en las barreras a ambos lados de las calles de la ciudad tienen una oportunidad como ninguna otra de estar cerca de la acción.

Vivir en Mónaco durante el Gran Premio es una experiencia única en la vida, y Montecarlo cobra vida durante todo el mes de mayo. La clasificación tiene lugar en los días previos a la carrera principal, cuando las calles, normalmente somnolientas, se llenan de visitantes, aficionados a las carreras y algunas de las megaestrellas del mundo.

Mónaco es quizás el único lugar del mundo en el que se puede encontrar tomando una copa en el verdadero circuito de carreras de la F1 sólo horas antes de la carrera en sí. Ponte tus mejores galas y dirígete a uno de los muchos bares que rodean el barrio del puerto, parando en el camino para ver los mega yates que están amarrados en el glamuroso puerto deportivo. Al anochecer, puede que incluso se encuentre en uno de los bares o clubes que aparecen en Montecarlo para la temporada de los Grandes Premios. O ir a las boutiques de la Avenue des Beaux Arts para encontrar marcas de diseño y precios atractivos.

El ambiente en el día de la carrera es eléctrico, cuando las calles, normalmente somnolientas, se transforman en el circuito de carreras más famoso del mundo. Los aficionados a los deportes de motor querrán ver la pista de carreras, aunque notarán que todos los balcones, azoteas y puntos elevados de toda la ciudad están repletos de gente que ve pasar a los pilotos.

Naturalmente, las vacaciones en Mónaco durante el Gran Premio pueden tener un precio muy alto, pero también es posible tener una base cerca y disfrutar de todo el glamour y el hedonismo de Mónaco sin tener que pagar un dineral. Las agencias ofrecen algunos paquetes de Gran Premio con alojamiento en los alrededores y en la ciudad de Niza, lo que le permite escapar de la acción y relajarse una vez que el gran día ha terminado.

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